31.5.10

María

Madre Santa:
Rosa Eterna de mi corazón,
concédeme por tu mediación
de todas las Gracias,
el poder conocerte,
guardarte dentro de mi,
y amarte como verdadera Madre Celestial.

Permítele a mi empedrado corazón
ser humillado y contrito,
para enamorarme de ti
y entregarte la devoción que te pertenece
desde antes de que yo naciera.

Porque se bien que a través de ti,
llegamos a Cristo,
y a través de tu hijo,
llegamos a Dios.

Amén, así sea, así es

2 comentarios:

Susana dijo...

Amén!!! Que María te acompañe siempre. Puedes pasar por mi blog a retirar tu premio Dardos, felicidades!!!!!
paz y bien

Susana dijo...

Y nuevamente aquí para que pases por tu premio Deseo Eterno! Espero en Jesús que estés bien, y me gustaría que sigas escribiendo!!!
abrazo en Cristo y María